miércoles, 2 de marzo de 2011

IMPORTANCIA DE LA FILOSOFÍA

El por qué de la filosofía.
OCTAVIO PAZ



"¿Tiene sentido empeñarse hoy, a finales del siglo XX o comienzos del  XXI, en mantener la filosofía como una asignatura más del bachillerato? (...) ¿Pueden los jóvenes, adolescentes más bien, niños incluso, sacar algo en limpio de lo que a su edad debe resultarles un galimatías? ¿No se limitarán en el mejor de los casos a memorizar unas cuantas fórmulas pedantes que luego repetirán como papagayos? Quizá la filosofía interese a unos pocos, a los que tienen vocación filosófica, si es que tal cosa aún existe, pero ésos ya tendrán en cualquier caso tiempo de descubrirla más adelante. Entonces, ¿por qué imponérsela a todos en la educación secundaria? ¿No es una pérdida de tiempo caprichosa y reaccionaria, dado lo sobrecargado de los programas actuales de bachillerato? (...)"






Esta es la opinión de un escritor que seguramente habrá analizado muchos casos antes de hacer estas afirmaciones, sin embargo, ¿está de todo en lo cierto?. En parte si que estoy de acuerdo en que la mayoría de los conceptos dados en clase se memorizan con la intención de aprobar el examen y ya está. Pero si vamos un poco más allá y leemos entendiendo estos conceptos seremos capaces de "filosofar" a nuestra manera con los pocos conocimientos que tenemos de la vida. Si se adquiere una conducta de atención en clase y, más que intentar escuchar al profesor para saber si esto cae en el examen o esto otro no es importante, se le escuchase intentando entender, entonces sería cuando el alumno comenzase a entender lo que en realidad es la filosofía.
Todos los conceptos que nos hemos aprendido de memoria tienen lógica, de otra manera no tendríamos que estudiarlos, ¿no?. Así que mi propuesta es sencilla, en vez de apuntar las posibles preguntas de examen, ¿por qué no tratamos de entender lo que nuestros profesores se empeñan tanto en enseñarnos? Más que coger apuntes, lo que deberíamos hacer sería intentar ponernos en el lugar del filósofo estudiado e intentar imagina rcómo llegó a esa conclusión. De esta manera podremos crearnos dudas que seguramente los profesores estarán encantados de resolver. No nos lo tomemos como una asignatura aburrida, tomemoslo como una clase para prepararnos para afrontar las dificultades de la vida. Porque no todo el mundo puede explicarnos cómo afrontaron sus vidas cada uno de los filósofos que estudiamos tan bien como lo pueden llegar a hacer ellos, siempre y cuando les escuchemos.


Janire Flores, 1º A (3ªevaluación)

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